Madres de algunos de los 43 normalistas desaparecidos en la descubierta de la marcha en la colonia |
Por las calles de una colonia popular de
Iztapalapa, Ciudad de México, la gente pudo escuchar las voces de cuatro madres
cuyos hijos son parte de los 43 jóvenes que fueron desaparecidos forzadamente
por las fuerzas armadas y policíacas del Estado, como también las consignas
entonadas por aproximadamente 40 compañeros que se sumaron a la convocatoria de
la Red Nacional de Resistencia ¡Alto a la Guerra contra el Pueblo! (RNR-AGCP)
para marchar por esas calles y así culminar la Tercera Semana Nacional de
Resistencia ¡Alto a la Guerra Contra el Pueblo!
En la colonia, alguna gente salía a sus puertas o
sus ventanas, otras salían a las esquinas o transitaban por la calle y se
detenían al escuchar por el sonido: “No estamos todos ¡Nos faltan 43!”, “¡De Iguala
a Los Pinos Cárcel a los Asesinos! ¡Todo el pinche sistema es culpable!”,
“Buscando 43, encontramos más de cien”, “Resistencia Nacional contra el Estado Criminal”,
“En los cuarteles y Los Pinos están los asesinos”. También recibían los volantes
que les pasaban algunos compañeros.
El "frentemóvil" con manta "Ayotzinapa: ¡De Iguala a Los Pinos, cárcel a los asesinos! ¡Todo el pinch sistema es culpable! |
En una parada que se hizo, dos de las madres de
normalistas desaparecidos denunciaron que “Sabemos que la policía se los llevó
y ellos tienen que entregárnoslos. Nuestros muchachos no eran ningunos
delincuentes. ¡Estudiar no es un delito!” Alentaron a la gente: “¡Únanse,
tenemos que luchar! Todos tenemos hijos. Madres, ¡únanse!, porque no sabemos a
quién le puede tocar este dolor que nosotras sentimos por nuestros hijos que
están desaparecidos. Únanse para que esto no siga”. Varias personas escucharon
desde sus puertas o ventanas estas palabras alentadoras.
También al ritmo de “La Llorona” una compañera al
micrófono cantó:
“El pueblo camina junto,
Queremos al pueblo despertar
Desde Tijuana hasta Chiapas, señores
La lucha contra el poder
No somos todos señores
Nos faltan 43
Este gobierno asesino señores
Nos quiere desaparecer.”
Al concluir la marcha, se realizó un mitin. Un
compañero de la UPVA denunció la represión que ha lanzado contra ellos el
gobierno estatal de Moreno Valle: “Nos han golpeado y nos quieren acabar, pero
no lo han logrado. Aquí estamos y seguiremos en la lucha. Han encarcelado a
nuestro dirigente Rubén Sarabia “Simitrio” y a otros dos compañeros, uno de
ellos el hijo de “Simitrio”. Quieren destruir nuestra organización: ¡no nos
vamos a dejar!”
El compañero del Movimiento Popular Revolucionario
(MPR), señaló que no nada más aquí estamos luchando. “Rise Up October / De
Pie en Octubre movilizó a la gente a ir a Nueva York en Estados Unidos para
parar el asesinato policial contra los negros, latinos y otros. Tarantino, un
cineasta que ganó el Oscar, participó en esa movilización y habló del asesinato
en Ferguson de Michael Brown por parte de la policía racista”. El compañero del
MPR también habló del feminicidio que se incrementa en el país, y que en “Ciudad.
Juárez los cuerpos ahora los arrojan a un arroyo”. Habló de la necesidad de una
revolución “que puede crear una nueva sociedad socialista, donde las relaciones
entre los seres humanos sean radicalmente diferentes, donde las mujeres por
ejemplo puedan ser tratadas como plenos seres humanos”, y mencionó que la
marcha-mitin era la culminación en el Distrito Federal de la Tercera Semana
Nacional de Resistencia ¡Alto a la Guerra Contra el Pueblo. Finalmente,
agradeció a todos los que participaroní, “actuando como una comunidad que lucha
y respalda, se solidariza con todas las víctimas, y una resistencia necesaria
para ¡Parar la guerra contra el pueblo!”
Las cuatro madres hablaron, señalando entre otras
cosas que “Sabemos que fue la policía la que se llevó a nuestros hijo, y no
vamos a descansar hasta que nos los entreguen, porque ellos saben donde están”
y que “el gobierno ha dicho muchas mentiras, y se ha sabido gracias al equipo
de expertos. Nos han mentido y ya no les creemos”. Una de ellas fue enfática en
puntos importantes: “Por el C4 [Centro de Control, Comando y Computo] ya
seguían a los muchachos, los monitoreaban, todos sabían, la policía federal,
estatal, municipal ¡y el ejército! Ellos son culpables y tienen que ser
castigados, tienen que pagar por lo que hicieron”. Todas agradecieron a los que
participaron y nos alentaron a “Seguir luchando juntos por justicia para todos
los desaparecidos, los presos políticos”.
Al final un dúo de rap, dos jóvenes prendidos,
soltaron sus poemas rítmicos de denuncia contra el gobierno que acosa y asesina
a los jóvenes, y también alentaban a seguir luchando: “No conformarnos, no
derrotarnos. Nosotros luchamos con nuestro arte que es el rap, y estamos aquí
hoy igual que ustedes en la calle para que todo esto cambie, y para luchar por
nuestros 43 compañeros”. Aplausos se escucharon al final de sus canciones.
Bayron, otro joven rapero de la zona, animado, aun
cuando ya no había sonido—se terminó el combustible de la planta de luz—también
lanzó sus poemas a través del megáfono, en solidaridad y lucha con Ayotzinapa.
Todas las contribuciones fueron valiosas y fueron
parte de lo que hizo posible que se llevara a cabo esta actividad, sin olvidar
a las personas que elaboraron los alimentos.
Otras mantas de la marcha-mitin. |
Este es un paso inicial, nada fácil, con errores y
aciertos, que puede seguir forjando la resistencia que lucha contra el poder y
transformar al pueblo para la revolución. Al platicar y debatir con la gente
sobre la importancia de participar en esta combativa marcha, fue importante la
lucha contra la “ideología Facebook”, como señala Bob Avakian, de ir con la
corriente de lo que piense la gente, aunque no tenga razón. Con una actitud de
‘hoy nos trataron bien, y nos dijeron que sí, ahhh entonces, hurra, nos animamos.
Hoy nos trataron mal y nos rechazaron, uffff nos desanimamos’. Como señala
Avakian, “Lo que piensa la gente es una parte de la realidad objetiva,
pero lo que piensa la gente no determina la realidad objetiva”. Es una importante
lección.
Continúan los crímenes contra las mujeres,
migrantes, jóvenes, periodistas, luchadores sociales y comunidades originarias
que defienden sus recursos naturales. Muchos de estos crímenes son cometidos
por las fuerzas armadas o policíacas del Estado mexicano, o son cómplices en
ellos. Frente a esta situación crítica sigue siendo necesario construir un
movimiento de resistencia creciente y decidido a poner un ¡alto a la guerra
contra el pueblo!
A la vez que la gente lucha contra estos crímenes,
cuando levanta la cabeza y se une a otros para resistir, pueden surgir
importantes interrogantes y vislumbrar que una nueva sociedad puede ser
posible. ¿Cuál es el problema y cuál es la solución? El problema es el sistema
capitalista-imperialista que sofoca y destroza la vida de la inmensa mayoría
aquí y por todo el mundo, y el Estado encargado de reforzar y reproducir esa
degradación, miseria y explotación. La solución es una revolución comunista que
barra con este Estado y este sistema para finalmente acabar con todos los
horrores que causan a la humanidad. La resistencia puede y debe contribuir a la
revolución. Como lo plantea un volante de la Organización Comunista
Revolucionaria, México (OCR, M): “Como parte de preparar el terreno,
preparar al pueblo y forjar la fuerza dirigente que hace falta para hacer esta
revolución, luchamos por unir a todos los que vean intolerable la violencia
injusta que comete o solapa el Estado en contra del pueblo, a luchar por
parar esta guerra contra el pueblo…”
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