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Ya basta de tantos
crímenes, injusticias y sufrimientos innecesarios. No queremos vivir así
y no tenemos que vivir así. Siguen once asesinatos de mujeres cada
día; siguen desbordados la trata, el acoso, la opresión general a las mujeres.
Siguen la discriminación y el despojo a los pueblos indígenas, ya intensificado
por los megaproyectos capitalistas de etnocidio y ecocidio como el mal llamado
Tren “Maya”, el proyecto del Istmo, e innumerables proyectos mineros. La gran
mayoría de la gente vive la pobreza, el abuso, la injusticia. Para los que
protestan o siquiera informan bien de lo que pasa, la respuesta es la
persecución o la muerte, con una siniestra confabulación entre los grandes
capitalistas, el crimen organizado y el Estado. Por esa misma confabulación,
fosas clandestinas brotan por dondequiera, con más de 140 mil homicidios
dolosos y 44 mil desaparecidos tan solo en lo que va del sexenio actual. Las
fuerzas armadas y policías mexicanas, cumpliendo los dictados del gobierno
estadounidense, acosan, golpean, encarcelan y matan a cada vez más migrantes.
Se está acelerando el calentamiento global por la quema del
petróleo y otros combustibles fósiles. Con eso se va transformando gran parte
del país y el mundo en un desierto inhabitable, además de muchos otros
trastornos. Esta y otra destrucción del medio ambiente ya ha llevado a la
extinción a muchas especies y, si no se detiene, llevaría a la extinción de
muchas más, incluida tal vez la nuestra. Las grandes potencias imperialistas se
pelean cada vez más violentamente entre sí por el dominio del mundo, con el
creciente peligro de una guerra nuclear mundial desastrosa para toda la
humanidad y el planeta.
Nada de esto es
tolerable ni necesario. No tenemos que vivir así. Todos estos horrores y
más son producto de un sistema, el sistema capitalista-imperialista
mundial. En México vivimos en un sistema mayormente capitalista dominado por el
imperialismo, principalmente estadounidense. Hay que enfrentar el hecho de que
el problema de fondo no es este u otro político, este u otro partido y no se resolverá simplemente con una u otra
reforma ni "poniendo mi granito de arena” de alguna manera bajo este
sistema. El problema es el sistema
capitalista de explotación y opresión y la solución es la revolución socialista,
para crear una sociedad radicalmente distinta y mucho mejor. Por eso, hay que
luchar por:
EL PROGRAMA
REVOLUCIONARIO PARA UN PAÍS SOCIALISTA, INDEPENDIENTE E INTERNACIONALISTA:
1. Hacer añicos el
Estado actual y establecer una República Socialista: El Estado actual
es esencialmente un aparato de represión para resguardar y mantener el actual
sistema de explotación y opresión, y eso no cambia por las diferencias en
retórica y política entre los políticos que administran ese Estado. Por eso las
fuerzas armadas y policías siguen espiando, torturando, desapareciendo y
matando, año con año, a gente del pueblo, para mantenerlo amedrentado y
oprimido. El primer paso de la revolución liberadora será hacer añicos el
Estado actual y establecer, a partir de la misma lucha revolucionaria del
pueblo, un nuevo Estado socialista
radicalmente distinto, que servirá, no para reprimir al pueblo, sino para apoyar la lucha del pueblo por acabar
con toda forma de explotación y opresión. No solo se permitirá sino que se alentará el disentimiento y el debate,
para identificar problemas y errores en la nueva sociedad y para contribuir a
esclarecer la verdad sobre una base científica. Incluso se permitirá que se
expresen ideas a favor de la vieja sociedad capitalista, pero intentos armados
de tumbar el Estado socialista serán sofocados. Se romperán los tratados y
acuerdos internacionales desiguales y se expulsará a los agentes de las
potencias imperialistas, a la vez que se dará la bienvenida y apoyo a los
migrantes.
2. Confiscar la
propiedad de las clases dominantes y comenzar la transformación socialista:
Los grandes capitalistas extranjeros y mexicanos controlan las partes decisivas
de la economía y la subordinan a su desenfrenada competencia por ganancias,
explotando al pueblo y destruyendo el medio ambiente. La revolución triunfadora
confiscará sin compensación su propiedad y la transformará en una economía socialista planificada al
servicio de las necesidades de la gente, el saneamiento del medio ambiente, el
desarrollo de un país independiente y el avance de la revolución mundial.
En cuanto a los capitalistas pequeños y medianos, habrá un proceso de ir
incorporando sus negocios a la economía socialista, generalmente por medio de
la expropiación con compensación.
3. Repartir la
tierra entre los campesinos e impulsar la colectivización voluntaria posterior:
El reparto de parte importante de la tierra es necesario tanto como cuestión de
justicia como por la necesidad de romper con el modelo de grandes explotaciones
dependientes de empresas transnacionales y basadas en los monocultivos,
agrotóxicos y transgénicos que tanto daño hacen a la naturaleza y la salud. Se
impulsará una agricultura diversificada,
descentralizada y orientada al uso de insumos naturales, así como el bienestar
de los campesinos, el pueblo en general y la naturaleza. Como parte de
esto, se impulsará en su momento una colectivización voluntaria para fortalecer
relaciones de apoyo mutuo entre los campesinos y la economía socialista en su
conjunto.
4. Autonomía
regional e igualdad para los pueblos indígenas: Los pueblos indígenas serán
una fuerza revolucionaria fundamental para derrocar el Estado reaccionario e
impulsar la transformación liberadora del país. Como parte de superar los
siglos de opresión, se establecerán regiones
autónomas en zonas indígenas, a las que también se dará apoyo especial para
el desarrollo de la economía, las culturas y los idiomas de los diversos
pueblos indígenas. El reparto agrario habrá de respetar sus legítimas demandas de restitución de lo robado. Se desatará una
lucha en toda esfera y en todo el país en contra
de la discriminación y el racismo.
5. Liberación e
igualdad para las mujeres: La opresión de las mujeres data de hace miles
de años, cuando surgió junto con la división de las sociedades en explotadores
y explotados. La furia de las mujeres será una fuerza poderosa para esta
revolución encaminada a acabar con toda forma de opresión y explotación. La
revolución establecerá el pleno derecho
al aborto gratuito a solicitud de la mujer, hará justicia expedita para todos
los crímenes e impulsará una tremenda lucha por acabar con toda forma de
patriarcado, discriminación y machismo en la sociedad.
6. Una nueva
cultura crítica, científica, diversa e inspiradora: En vez de la
asquerosa cultura dominante actual de "superarse" a expensas de los
demás, de promover el desprecio a los "prietos", indígenas y mujeres,
así como la ignorancia y todo tipo de ideas anticientíficas, la revolución desatará
una explosión de creatividad y el
florecimiento de una nueva cultura diversa y liberadora, con las
contribuciones tanto de profesionales como de mucha gente de las amplias masas.
Se promoverán entre toda la población los
conocimientos científicos básicos y el método científico, así como el razonamiento basado en la evidencia en
vez de las descalificaciones personales demagógicas y la imposición. A la vez
que se alientan la diversidad y el
disentimiento, los revolucionarios lucharán en contra de ideas reaccionarias como el machismo, el racismo y el
desprecio a la gente LGBTQ+.
7. Servir de base
de apoyo para la revolución mundial: Aun con el triunfo de la
revolución en este o en varios países, persistirá el sistema
capitalista-imperialista mundial explotando y oprimiendo a la gente, tratando
de revertir estas revoluciones y amenazando el futuro de la humanidad. Habrá
que promover la revolución mundial y
también continuar la revolución bajo el socialismo en México hasta lograr
la emancipación de toda la humanidad
en el comunismo, con la eliminación de toda forma de explotación, opresión y
desigualdad social en el mundo entero.
No queremos y no
tenemos que seguir viviendo bajo el pútrido sistema actual. La revolución,
la única salida real a toda esta locura, requiere finalmente la lucha decidida
y consciente de millones. Tú puedes
hacer una contribución muy necesaria ahora al futuro de la humanidad.
Éntrale a conocer más sobre esta revolución y el nuevo comunismo en el blog de Aurora Roja y en revcom.us. Escríbenos
un correo electrónico o contáctanos en Facebook. Hay muchas formas de
contribuir y participar, comenzando con algo tan sencillo como compartir este
volante y otros materiales revolucionarios.
¡El futuro de la humanidad depende de lo que hagamos hoy!
¡El problema es el sistema capitalista, la
solución es la revolución socialista!
Aurora Roja
Voz de la Organización Comunista Revolucionaria, México
aurora-roja.blogspot.com auroraroja.mx@gmail.com
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